Introducción- Formas de la nariz
La nariz humana sirve como el principal sentido del olfato del cuerpo y como un componente del sistema respiratorio. A través de la nariz, el aire entra en el cuerpo. El cerebro reconoce y categoriza los olores a medida que se mueven a través de las células especializadas del sistema olfativo. Los pelos nasales filtran partículas extrañas del aire. Antes de entrar en los pulmones, el aire se calienta y humidifica a medida que pasa a través de las fosas nasales.
La forma de los huesos nasales y el cartílago nasal son los principales determinantes de las formas de la nariz. Estos huesos o cartílagos de la nariz pueden ser alisados, aumentados y mejorados por los cirujanos durante un procedimiento de remodelación de la nariz. La nariz romana, la nariz chata y la nariz griega son las formas más comunes solicitadas por los solicitantes de cirugía plástica, a pesar de que todas las formas de la nariz tienen sus propias ventajas estéticas distintivas y los estándares de belleza solo deben estar relacionados con la perspectiva del espectador. Al igual que otras partes del cuerpo, no hay dos narices exactamente iguales. Para determinar qué nariz coincide más estrechamente con la de un individuo, existen características compartidas y puntos en común que se pueden detectar.
El término "raza" describe cómo se clasifican las personas en función de los rasgos que comparten que desarrollaron mientras residían en un área determinada. Los diferentes grupos raciales o étnicos con frecuencia exhiben varios rasgos físicos distintos. Se cree que uno de los rasgos faciales, la forma de la nariz, varía entre las diferentes etnias. Se adapta a un determinado hábitat y clima regional a lo largo del tiempo cambiando y evolucionando de una generación a la siguiente. Debido a esto, los diferentes descendientes tienen una amplia variedad de formas de nariz. Por ejemplo, teniendo en cuenta los pequeños puentes en las narices de los europeos, se cree que es una adaptación al ambiente frío de su región. Numerosas investigaciones sobre el tema han encontrado que las variaciones observadas en las formas de la nariz entre las personas no son solo el resultado de un cambio genético, sino que también reflejan adaptaciones a un clima particular. Según múltiples estudios, la temperatura y la humedad absoluta tienen un impacto en la anchura de la nariz. Como resultado, varias características de la forma de la nariz están influenciadas por la adaptación climática, sin embargo, esta es una descripción condensada de una historia bastante compleja. Por lo tanto, debemos ser conscientes de que otros elementos, incluido el género, también juegan un papel, ya sea más o menos.
Este artículo tiene como objetivo explorar las diferencias en la arquitectura de la nariz entre varios grupos étnicos.