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última fecha actualizada: 11-Mar-2024

Escrito originalmente en inglés

Todo lo que necesita saber sobre la enfermedad de Parkinson

    La enfermedad de Parkinson es una enfermedad progresiva del sistema nervioso que afecta principalmente al movimiento. Los síntomas comienzan gradualmente, a veces con temblores apenas perceptibles en una sola mano.

    Aunque no existe una cura para la enfermedad de Parkinson, la medicación puede mejorar en gran medida sus síntomas. A veces, su médico puede recomendar cirugía para regular ciertas áreas del cerebro y mejorar los síntomas.

     

    Causas de la enfermedad de Parkinson

    En la enfermedad de Parkinson, ciertas neuronas en el cerebro mueren gradualmente. Muchos síntomas son causados por la pérdida de estas neuronas que producen una sustancia química llamada dopamina. Cuando el nivel de dopamina disminuye, puede causar actividad cerebral anormal, lo que puede conducir a una actividad restringida y otros síntomas de la enfermedad de Parkinson. La causa de la enfermedad de Parkinson es desconocida, pero varios factores parecen desempeñar un papel, incluyendo:

    • Genética. Las investigaciones han demostrado mutaciones específicas en ciertos genes que pueden desempeñar un papel, por lo tanto, la enfermedad de Parkinson es hereditaria. Sin embargo, estos son raros, excepto en casos raros donde muchos miembros de la familia sufren de la enfermedad de Parkinson.
    • Factores ambientales. La exposición a ciertas toxinas o desencadenantes ambientales aumentará el riesgo de enfermedad de Parkinson en el futuro, pero el riesgo es relativamente pequeño.

    Los investigadores también encontraron que hay muchos cambios en los cerebros de los pacientes con enfermedad de Parkinson, aunque las razones de estos cambios no están claras. Estos cambios incluyen:

    • La existencia de cuerpos de Lewy. Los grupos de ciertas sustancias en las neuronas del cerebro son marcadores microscópicos de la enfermedad de Parkinson. Estos se llaman cuerpos de Lewy, y los investigadores creen que estos cuerpos de Lewy proporcionan pistas importantes sobre la causa de la enfermedad de Parkinson.
    • Alfa-sinucleína encontrada en cuerpos de Lewy. Aunque se han encontrado muchas sustancias en los cuerpos de Lewy, los científicos creen que una sustancia importante es una proteína natural y ampliamente disponible llamada alfa-sinucleína (a-sinucleína). Aparece en todos los cuerpos de Lewy como grupos que no pueden ser desatados por las células. Esta es una preocupación importante de los investigadores de Parkinson.

     

    Signos y síntomas de la enfermedad de Parkinson

    Los signos y síntomas de la enfermedad de Parkinson varían de persona a persona. Los primeros signos pueden ser leves e incluso pueden pasar desapercibidos. Los síntomas generalmente comienzan en un lado de su cuerpo y generalmente continúan empeorando en ese lado, incluso si los síntomas comienzan a afectar a ambos lados. Los temblores son comunes, pero esta enfermedad también causa rigidez o lentitud gradual de movimiento. En las primeras etapas de la enfermedad de Parkinson, su cara puede tener poca o ninguna expresión. Los brazos ya no se balancean al caminar. Su habla puede ser arrastrada. A medida que la enfermedad progresa, los síntomas empeorarán con el tiempo.

    Los signos y síntomas del Parkinson pueden incluir:

    • Temblor. Los temblores (temblores) generalmente comienzan en una extremidad, generalmente dentro de la mano o los dedos. Sus manos pueden temblar incluso cuando descansa.
    • Bradicinesia (movimiento lento). Con el tiempo, la enfermedad de Parkinson puede ralentizar su movimiento, lo que hace que las tareas simples sean difíciles y, a menudo, consuman mucho tiempo. Cuando camina, sus pasos pueden acortarse. Puede ser difícil levantarse de la silla. Incluso puede comenzar a arrastrar los pies cuando intenta caminar.
    • Músculos rígidos. La rigidez en los músculos puede ocurrir en cualquier parte de su cuerpo. Los músculos rígidos pueden ser muy dolorosos y pueden restringir su libertad de movimiento.
    • Cambios de escritura. Puede ser difícil para usted escribir normalmente.
    • Pérdida del movimiento automático. Su capacidad para realizar movimientos inconscientes puede disminuir, incluyendo parpadear, sonreír o balancear los brazos mientras camina.
    • Cambios en el habla. Antes de hablar, puede hablar en voz baja, rápidamente, vagamente o vacilantemente. Su discurso puede ser más monótono de lo habitual.

    Problemas con la postura y el equilibrio. Su postura puede cambiar, o puede tener problemas de equilibrio debido a la enfermedad de Parkinson.

     

    Diagnóstico de la enfermedad de Parkinson

    Diagnóstico de la enfermedad de Parkinson

    El diagnóstico de la enfermedad de Parkinson generalmente se basa en los síntomas. Diagnosticar esta enfermedad en las primeras etapas puede ser un desafío, pero un profesional capacitado puede concluir con precisión que es la enfermedad de Parkinson. Para que un neurólogo diagnostique esta enfermedad, debe tener al menos dos de los siguientes síntomas durante un período de tiempo:

    • Temblores;
    • Rigidez o rigidez en los brazos, tronco o piernas;
    • Problemas para mantener el equilibrio e incluso posibles caídas;
    • Ralentización de los movimientos (bradicinesia).

    En la mayoría de los casos, la enfermedad de Parkinson es diagnosticada por un médico de familia o internista, sin embargo, muchas personas buscan ayuda de un neurólogo para controlar sus síntomas y enfermedades.

     

    Las etapas del Parkinson

    • La primera etapa. En esta etapa inicial, el paciente tiene síntomas leves y generalmente no interfieren con las actividades diarias. Los temblores y otros síntomas motores solo ocurren en un lado del cuerpo. Hay cambios en la postura, la marcha y las expresiones faciales.
    • Segunda etapa. Los síntomas comienzan a empeorar. Los temblores, la rigidez y otros síntomas motores pueden afectar ambos lados del cuerpo ahora. Los problemas para caminar y la mala postura pueden volverse obvios. Las personas todavía pueden vivir solas, pero el trabajo diario es más difícil y tedioso.
    • La tercera etapa. Esta etapa se considera a medio plazo, caracterizada por pérdida de equilibrio y movimientos lentos. Las caídas son más comunes. La persona sigue siendo completamente independiente, pero los síntomas pueden interferir gravemente con actividades como vestirse y comer.
    • Cuarta etapa. En este punto, los síntomas son graves y debilitantes. La persona puede pararse de forma independiente, pero puede requerir un andador para moverse. La persona necesita ayuda en las actividades de la vida diaria y no puede vivir sola.
    • Nivel cinco. Este es el nivel más avanzado y limitante. Las piernas rígidas pueden hacer que estar de pie o caminar sea imposible. La persona necesita una silla de ruedas o está postrada en cama. Todas las actividades deben ser atendidas durante todo el día. La persona puede experimentar alucinaciones y delirios. La comunidad de Parkinson reconoce que hay muchos síntomas importantes no motores y motores.

     

    Teoría de la progresión de la enfermedad de Parkinson

    La teoría actual (parte de la hipótesis de Braak) es que los primeros signos de la enfermedad de Parkinson aparecen en el sistema nervioso entérico, la médula y el bulbo olfatorio, responsables de controlar el sentido del olfato. Según esta teoría, la enfermedad de Parkinson solo progresará a la sustancia negra y la corteza con el tiempo.

    Lo que confirma la teoría es que los síntomas no motores como la pérdida del olfato (disosmia), el insomnio y el estreñimiento pueden aparecer años antes que las características motoras de la enfermedad. Por lo tanto, los investigadores están prestando cada vez más atención a estos síntomas no motores para detectar la enfermedad de Parkinson lo antes posible y encontrar formas de detener su progresión.

     

    Tratamiento de la enfermedad de Parkinson

    Aunque no existe una cura estándar para la enfermedad de Parkinson, el tratamiento se utiliza para controlar algunos de los síntomas. Los tratamientos incluyen cirugía, medicamentos y cambios en el estilo de vida, como descansar más y hacer ejercicio regularmente.

    Hay diferentes medicamentos que se utilizan para tratar la enfermedad de Parkinson:

    • Que aumentan los niveles de dopamina en el cerebro;
    • Que afectan a otras sustancias químicas del cerebro en el cuerpo;
    • Que ayudan a controlar los síntomas no motores.

    El tratamiento principal para la enfermedad de Parkinson es la levodopa, también llamada L-dopa. Las células nerviosas usan L-dopa para estimular la dopamina para compensar las reservas agotadas del cerebro. Los pacientes generalmente toman levodopa con otro medicamento llamado carbidopa. La carbidopa puede prevenir o reducir algunos de los efectos secundarios del tratamiento con levodopa, como náuseas, vómitos, hipotensión, irritabilidad y también puede reducir la cantidad de levodopa necesaria para mejorar los síntomas. Hay muchas formas en que se encuentra este medicamento, tales como:

    • Carbidopa y levodopa. La levodopa es el fármaco más eficaz para tratar la enfermedad de Parkinson. Es una sustancia química natural que puede entrar en el cerebro y convertirse en dopamina. La combinación de levodopa y carbidopa (Lodosyn) protege la conversión temprana de levodopa en dopamina fuera del cerebro. Esto puede prevenir o reducir los efectos secundarios como las náuseas. Los efectos secundarios pueden incluir náuseas o somnolencia (hipotensión posicional). Años más tarde, a medida que su enfermedad progresa, los beneficios de la levodopa pueden no seguir siendo los mismos, ya que los efectos de este medicamento tienden a disminuir después de tomarlo durante períodos de tiempo más largos. Además, los movimientos involuntarios (discinesias) pueden ocurrir después de tomar dosis más altas de levodopa. Su médico puede reducir su dosis o ajustar el tiempo de administración para controlar estos efectos.
    • Carbidopa y levodopa inhaladas. Cuando los medicamentos orales dejan de funcionar repentinamente durante el día, esta alternativa puede ayudar a controlar los síntomas que aparecen.
    • Infusión de carbidopa y levodopa. Duopa es un medicamento de marca que consiste en carbidopa y levodopa. Sin embargo, se administra a través de una sonda de alimentación, que administra el medicamento en forma de gel directamente al intestino delgado. Duopa se utiliza en pacientes con enfermedad de Parkinson avanzada. Estos pacientes todavía responden a carbidopa y levodopa, pero sus respuestas varían ampliamente. Dado que Duopa es una infusión continua, la concentración sanguínea de los dos medicamentos permanece constante. El cateterismo requiere cirugía menor. Los riesgos asociados con el uso del catéter incluyen pérdida del catéter o infección en el sitio de infusión.

    Los pacientes con enfermedad de Parkinson no deben dejar de tomar levodopa o cualquier medicamento sin consultar primero a un médico. La interrupción repentina de este medicamento puede causar efectos secundarios graves, como incapacidad para moverse o incluso dificultades para respirar.

     

    Otros medicamentos utilizados para tratar los síntomas del Parkinson son:

    tratar los síntomas del Parkinson

    • Agonistas dopaminérgicos,que imitan los efectos de la dopamina en el cerebro. A diferencia de la levodopa, los agonistas de la dopamina no se convierten en dopamina. En cambio, imitan el efecto de la dopamina en el cerebro.  No son tan eficaces como la levodopa en el tratamiento de sus síntomas. Sin embargo, duran más tiempo y se pueden usar con levodopa para reducir los efectos adversos que la levodopa a veces trae.  Los agonistas dopaminérgicos incluyen pramipexol (Mirapex), ropinirol (Requip) y rotigotina (Neupro, administrado como parche). La apomorfina (Apokyn) es un agonista de dopamina inyectable de acción corta utilizado para un alivio rápido. Algunos efectos secundarios de los agonistas de la dopamina son similares a la carbidopa y la levodopa. Pero también pueden incluir alucinaciones, letargo y comportamientos compulsivos como la hipersexualidad, el juego y la alimentación. Si está tomando estos medicamentos y muestra anomalías, consulte a su médico.
    • Inhibidores de la MAO-B,que ralentizan la enzima que descompone la dopamina en el cerebro. Ayudan a prevenir la descomposición de la dopamina en el cerebro mediante la inhibición de la enzima cerebral monoaminooxidasa B (MAO B). Esta enzima metaboliza la dopamina en el cerebro. Tomar selegilina (un inhibidor de la MAO-B) junto con levodopa puede ayudar a evitar que se desgaste demasiado rápido. Los efectos secundarios de los inhibidores de la MAO B pueden incluir dolor de cabeza, náuseas o insomnio. Cuando se combinan con carbidopa y levodopa, estos medicamentos aumentan el riesgo de alucinaciones. Estos medicamentos no se usan a menudo en combinación con la mayoría de los antidepresivos o ciertos anestésicos, porque pueden ocurrir reacciones graves pero raras. Consulte a su médico antes de tomar cualquier otro medicamento que contenga inhibidores de la MAO-B.
    • Inhibidores de COMT, ayudan a descomponer la dopamina.
    • Amantadina,un viejo medicamento antiviral que reduce los movimientos involuntarios.
    • Fármacos anticolinérgicos para reducir el temblor y la rigidez muscular.

     

    Estimulación cerebral profunda

    Para los pacientes de Parkinson que no responden bien a los medicamentos, la estimulación cerebral profunda, o DBS, puede ser apropiada. DBS es un procedimiento quirúrgico que consiste en implantar quirúrgicamente electrodos en una parte del cerebro y conectarlos a pequeños dispositivos electrónicos implantados en el pecho. El dispositivo y los electrodos estimulan el cerebro de una manera indolora y pueden prevenir muchos de los síntomas relacionados con el movimiento de la enfermedad de Parkinson, como el temblor, el movimiento lento y la rigidez.

     

    Otras terapias, incluidos los remedios caseros

    Se pueden usar otras terapias para aliviar los síntomas de la enfermedad de Parkinson. Esto incluye fisioterapia, terapia ocupacional y terapia del habla, que pueden ayudar a tratar los trastornos de la marcha y la voz, el temblor y la rigidez, y la disminución de la función mental. Otras terapias de apoyo incluyen alimentación saludable y ejercicio para fortalecer los músculos y mejorar el equilibrio.

    • Alimentación saludable. Aunque no se ha demostrado que ningún alimento o combinación de alimentos ayude a tratar la enfermedad de Parkinson, algunos alimentos pueden aliviar ciertos síntomas. Por ejemplo, comer alimentos ricos en fibra y beber muchos líquidos puede ayudar a prevenir el estreñimiento, que es común en la enfermedad de Parkinson. Una dieta equilibrada también proporciona nutrientes como los ácidos grasos omega-3, que son beneficiosos para los pacientes con enfermedad de Parkinson.
    • Hacer ejercicio regularmente. El ejercicio puede mejorar la fuerza muscular, la flexibilidad y el equilibrio. El ejercicio también puede mejorar su salud y reducir la depresión o la ansiedad, que están relacionadas con la enfermedad de Parkinson. Su médico puede recomendarle que trabaje con un fisioterapeuta para aprender un programa de ejercicios que sea adecuado para usted. También puede intentar caminar, nadar, jardinería, baile, aeróbicos acuáticos o ejercicios de estiramiento. La enfermedad de Parkinson puede alterar su sentido del equilibrio y dificultarle caminar con una marcha normal. El ejercicio puede mejorar su equilibrio. Estas sugerencias también pueden ser útiles para manejar los problemas de equilibrio:
    1. Trate de no moverse demasiado rápido.
    2. Al caminar, asegúrese de que el talón toque primero el suelo.
    3. Si te encuentras arrastrando los ojos, detente y revisa tu postura. Lo mejor es ponerse de pie.
    4. Cuando camines, mira hacia adelante, no hacia abajo.

     

    • Prevenir las caídas tanto como sea posible. En las últimas etapas de la enfermedad, es más probable que se caiga. De hecho, un pequeño golpe o empujón te hará perder el equilibrio. Las siguientes sugerencias pueden ayudar:
    1. Gira todo tu cuerpo en lugar de girar sobre tus pies.
    2. Distribuya su peso uniformemente entre sus pies, no se apoye en ellos.
    3. Evite llevar cosas al caminar.
    4. Evite caminar hacia atrás.

     

    • Actividades diarias. Las actividades diarias, como vestirse, comer, bañarse y escribir pueden ser difíciles para las personas con enfermedad de Parkinson. Un terapeuta ocupacional puede mostrarle técnicas que pueden facilitar la vida diaria.
    • La terapia de apoyo puede ayudar a aliviar algunos de los síntomas de la enfermedad de Parkinson, como el dolor, la fatiga y la depresión. Combinadas con su tratamiento, estas terapias pueden mejorar su calidad de vida:
    1. Masaje. La terapia de masaje reduce la tensión muscular y promueve la relajación. Sin embargo, este tratamiento rara vez está cubierto por las compañías de seguros de salud.
    2. Yoga. En el yoga, los estiramientos y posturas suaves pueden aumentar su flexibilidad y equilibrio. Puede ajustar la mayoría de las posturas para que se adapten a sus capacidades físicas.
    3. Técnica Alexander. Esta técnica, que se centra en la postura muscular, el equilibrio y el pensamiento sobre cómo usa sus músculos, puede reducir la tensión muscular y el dolor.
    4. Meditación. En la meditación, reflexiona con calma y concéntrate en una idea o imagen. La meditación puede reducir el estrés y el dolor, y mejorar su bienestar.
    5. Terapia con mascotas. Tener un perro o un gato puede aumentar su flexibilidad y agilidad, y mejorar su salud emocional.
    6. Tai Chi. El Tai Chi es una antigua forma china de ejercicio que utiliza movimientos lentos y suaves para mejorar la flexibilidad, el equilibrio y la fuerza muscular. El Tai Chi también puede ayudar a prevenir caídas. Varias formas de Tai Chi son adecuadas para personas de todas las edades y condiciones físicas. Un estudio mostró que el Tai Chi puede mejorar el equilibrio de los pacientes con enfermedad de Parkinson leve a moderada mejor que el estiramiento y el entrenamiento de fuerza.

     

    Factores de riesgo para la enfermedad de Parkinson

    Los factores de riesgo para la enfermedad de Parkinson incluyen:

    • Edad. Los síntomas de la enfermedad de Parkinson generalmente comienzan en la mitad o al final de la vida y el riesgo aumenta con la edad. Los jóvenes rara vez sufren de la enfermedad de Parkinson. Las personas generalmente se enferman cuando tienen 60 años o más.
    • Genética y herencia. Tener parientes cercanos con la enfermedad de Parkinson aumenta sus posibilidades de desarrollar la enfermedad. Sin embargo, a menos que muchos parientes de su familia tengan la enfermedad de Parkinson, su riesgo sigue siendo pequeño.
    • Sexo. Los hombres son más susceptibles a la enfermedad de Parkinson que las mujeres.
    • Exposición a toxinas. La exposición a largo plazo a herbicidas y pesticidas aumenta ligeramente el riesgo de enfermedad de Parkinson.

     

    Complicaciones de la enfermedad de Parkinson

    La enfermedad de Parkinson generalmente se acompaña de estos problemas adicionales que se pueden tratar:

    • Problemas de pensamiento. Es posible que tenga problemas cognitivos, como demencia y dificultad para pensar. Estos generalmente ocurren en las últimas etapas de la enfermedad de Parkinson. Este problema cognitivo no es muy sensible a la respuesta a los medicamentos.
    • Depresión y cambios de humor. Puede experimentar depresión, a veces en una etapa muy temprana de esta enfermedad., sin embargo, el tratamiento de la depresión puede hacer que sea más fácil lidiar con los otros desafíos de la enfermedad de Parkinson. Puede experimentar otros cambios emocionales, como ansiedad, miedo o pérdida de motivación. El médico puede darle medicamentos para tratar estos síntomas.
    • Dificultades para tragar. A medida que la enfermedad progresa, puede experimentar dificultad para tragar. A medida que la deglución se ralentiza, la saliva se acumulará en la boca, causando babeo.
    • Problemas para masticar y comer. La última enfermedad de Parkinson afecta a los músculos orales, lo que dificulta la masticación. Esto puede conducir a la asfixia y la desnutrición.
    • Trastornos del sueño. Las personas con enfermedad de Parkinson generalmente tienen problemas para dormir, incluyendo despertarse con frecuencia por la noche, despertarse temprano o quedarse dormido durante el día. Las personas también pueden sufrir de trastorno del comportamiento del sueño de movimiento ocular rápido. Los medicamentos pueden ayudar a resolver los problemas del sueño.
    • Problemas de vejiga. La enfermedad de Parkinson puede causar problemas de vejiga, incluida la incapacidad para controlar la orina o la dificultad para orinar.
    • Estreñimiento. Muchas personas con enfermedad de Parkinson experimentan estreñimiento, principalmente debido a un tracto digestivo más lento.

     

    Aunque estos son más raros, las personas con enfermedad de Parkinson también pueden experimentar:

    • Cambios en la presión arterial. Debido a una caída repentina de la presión arterial (hipotensión ortostática), es posible que se sienta mareado cuando se pone de pie.
    • Trastornos del olor. Puede haber problemas con su sentido del olfato. Es posible que no pueda distinguir la diferencia entre ciertos olores u olores.
    • Fatiga. Muchas personas con enfermedad de Parkinson pierden energía y se sienten cansadas, especialmente más tarde en la noche.
    • Dolor. Algunas personas con enfermedad de Parkinson experimentan dolor en partes específicas del cuerpo o en todo el cuerpo.
    • Disfunción sexual. Algunas personas con enfermedad de Parkinson notarán una disminución en la libido o el rendimiento sexual.

     

    Prevención de la enfermedad de Parkinson

    Dado que la causa de la enfermedad de Parkinson es desconocida, el método probado para prevenir la enfermedad aún no se ha descubierto. Algunos estudios han demostrado que el ejercicio aeróbico regular puede reducir el riesgo de la enfermedad de Parkinson.

    Otros estudios han demostrado que las personas que consumen cafeína (que se encuentra en el café, el té y algunos refrescos) tienen menos probabilidades de desarrollar la enfermedad de Parkinson que las personas que no beben cafeína. El té verde también se asocia con la reducción del riesgo de la enfermedad de Parkinson. Sin embargo, no está claro si la cafeína realmente puede prevenir la enfermedad de Parkinson, o si hay otros vínculos. No hay suficiente evidencia para recomendar el consumo de bebidas con cafeína para prevenir la enfermedad de Parkinson.

     

    En conclusión

    La enfermedad de Parkinson viene en muchas formas, pero es crucial prestar atención a los primeros signos de esta enfermedad. Algunos síntomas pueden no estar aparentemente relacionados con la enfermedad de Parkinson, por lo tanto, es importante que consulte a un médico si siente algún cambio en su cuerpo y estado mental. Puede anotar los síntomas para asegurarse de no olvidar nada de cuando consulte a un médico. A pesar de que no hay cura, el tratamiento para la colusión con los síntomas está disponible.